14 mar
Cada vez son más numerosos los estudios y análisis que enfatizan la creciente importancia del conjunto de herramientas tecnológicas, sistemas automáticos, dispositivos, recursos tecnológicos y de análisis de datos, que se esconden bajo la etiqueta tecnologías digitales, para reorientar los cuidados en su más amplia acepción. Existen agentes altamente cualificados que las desarrollan y ponen a punto para su implementación. El problema es que, si sus usuarios no poseen un cierto nivel de competencia tecnológica y de capacidad de aprendizaje, esas tecnologías dejan de tener utilidad (y hasta sentido).
Muchas de esas herramientas tienen como objetivo ayudar a los cuidadores a cuidar de manera más efectiva; sean profesionales o lo que se suele denominar cuidadores informales.
Por nuestra parte, en tanto que líderes y referentes en los cuidados de salud, las enfermeras tenemos que ser capaces de irnos actualizando en nuestras habilidades tecnológicas. ¿Lo somos? Muchos estudios –pocos de ellos en nuestro país, para ser honestos– ponen de manifiesto que no lo suficiente.
Hemos querido conocer la situación al respecto de la enfermería asturiana y para ello hemos realizado una encuesta ... ACCESO COMPLETO A LOS RESULTADOS